lunes, 28 de septiembre de 2009

LA HABANA ( PARTE 3 ).

El Malecón es un sitio de referencia en La Habana, lo llaman “ el banco más largo del mundo “ porque siempre hay gente sentada en sus casi ocho kilómetros de largo, cuando más gente hay es al anochecer. El sitio es privilegiado ya que en Cuba siempre hace mucho calor y cuando te sientas aquí te viene una brisa del mar que es una maravilla, muchos Cubanos dicen que se sientan aquí a pensar en que hay más allá del mar, pero yo creo que sentarse en el Malecón es una tradición que lleva pasando de padres a hijos durante muchos años. La única pega que tiene el Malecón es la suciedad que hay, aunque tengan papeleras los Habaneros se distinguen por ser un poco cerdos.


Castillo de los Tres Reyes del Morro y la Fortaleza de San Carlos de la Cabaña, estas dos fortalezas eran las que antaño custodiaban la entrada al puerto, para llegar a ellas hay que pasar un túnel que cruza la bahía. El Morro fue construido en el año 1589 y San Carlos en la segunda mitad del siglo XVIII, en este último destaca su gran colección de armas, y que todos los días del año a las 21 h. se celebra el cañonazo, donde soldados vestidos con uniformes de época disparan un cañonazo hacia el mar.



El Cristo de La Habana es una colosal escultura que representa a Jesús de Nazaret, esta obra es de la escultora cubana Jilma Madera. La estatua fue hecha de mármol de Carrara, tiene unos 20 metros de altura y reposa sobre una base de 3 metros, su peso aproximado es de unas 320 toneladas.



Otra de las virguerías de Cuba son sus coches, estas viejas reliquias aun recorren diariamente las calles de la ciudad, haciendo que parezca que el tiempo se detuvo. Muchos coleccionistas viajan a Cuba solo a ver estas antigüedades, y a intentar comprarlas, pero el gobierno no permite la salida de ningún coche de este tipo.


Esta foto es La Habana de noche sacada desde el Castillo de San Carlos el día que fuimos a ver la ceremonia del cañonazo que antes os conté.