Ultimas horas en Nueva York, a las tres y media venían a buscarnos al hotel para ir para el aeropuerto, así que fuimos a dar el último paseo por times square, hacer las últimas compras y para el hotel, ya que no sabíamos si nos entraría todo en las maletas. Aquí veis a Sory la pelea que tuvo con ellas.
Después de cerrar las maletas, una hamburguesa rápida y ya nos estaban recogiendo.
Llegamos al aeropuerto y nos pusimos a facturar, que pasa que la gente está sacando las cosas de las maletas, nos preguntamos, la ostia, había que pesar maleta por maleta y la que pasara de 23 kilos fuera, a sacar cosas. Pues hay nos toco a nosotros y empezamos a pesar, la primera 19 kilos, la segunda 26, hala a tomar por culo, fuera, abrir la de 19 y meterle los 3 kilos sobrantes, y menos mal que nos pasaron la tercera con 23,5.
Y aquí vino la mejor sorpresa, nos dice el tío que hay overbooking, que si nos importaría ir en primera clase, jojojo claro que no amigo, pues según pasan el control suben unas escaleras a mano izquierda y hay tienen la sala VIP, nos dice el tío, pues pa allí fuimos, entramos y vemos una fuente rodeada de hamacas para relajarse, tres barras llenas de bebida y comida para coger gratis, ordenadores y una sala para ver la televisión con una pantalla de por lo menos 80 pulgadas, esto es el no va más.
Llego la hora de embarcar y nos subimos al avión, y descubrimos que todo lo anterior no era el no va más sino esto, pero bueno esto lo dejamos para mañana, ya que fue tan bueno que se merece un día para el solo.