20 de Abril del 90.
Hola, chata, ¿cómo estás?
¿Te sorprende que te escriba?
Tanto tiempo es normal.
Pues es que estaba aquí solo,
me había puesto a recordar,
me entró la melancolía
y te tenía que hablar.
¿Recuerdas aquella noche en la cabaña del Turmo,
las risas que nos hacíamos antes todos juntos?
Hoy no queda casi nadie de los de antes,
y los que hay
han cambiado, han cambiado, sí.
Pero bueno, ¿tú qué tal? Di.
Lo mismo hasta tienes crios.
¿Qué tal te va con el tío ese?
Espero sea divertido.
Yo, la verdad, como siempre,
sigo currando en lo mismo.
La música no me cansa,
pero me encuentro vacío.
¿Recuerdas aquella noche en la cabaña del Turmo,
las risas que nos hacíamos antes todos juntos?
Hoy no queda casi nadie de los de antes,
y los que hay
han cambiado, han cambiado, sí.
Bueno, pues ya me despido,
si te mola me contestas.
Espero que mis palabras
desordenen tu conciencia.
Pues nada, chica, lo dicho,
hasta pronto si nos vemos.
Yo sigo con mis canciones
y tú sigues con tus sueños.
¿Recuerdas aquella noche en la cabaña del Turmo,
las risas que nos hacíamos antes todos juntos?
Hoy no queda casi nadie de los de antes,
y los que hay
han cambiado, han cambiado, sí.
Celtas Cortos